Preparando el viaje a casa

En un poco más de 24 horas, si todo va como está previsto, estaré camino de Algeciras, montada en uno de esos barquitos que cruzan el estrecho y que a mi, personalmente, no me hacen mucha gracia. Al menos para mañana no está previsto que el mar este muy bravo.

De todas formas mañana por la mañana me tocara venir a la tele... No os creais que lo que voy a hacer va a ser precisamente un viaje de placer. En las horas que vaya en el tren me tocará escribir, a mano, un artículo de 4 páginas para la revista con la que colaboramos. Es lo que tiene no tener portatil, pero vamos que de esta me compro uno porque va ser muy gracioso cuando llegue a casa y me tenga que poner a pasarlo a ordenador. Probablemente os pregunteis porque no lo estoy escribiendo ahora y estoy haciendo el vago... pues muy sencillo, porque aún no tengo la información, porque dependo de una entrevista que me darán a última hora de hoy.

Al menos la maleta ya la tengo hecha, bueno, casi hecha. Me falta meter lo típico: la bolsa de aseo, los zapatos y esas cosas de última hora con tendencia a olvidarse (tipo el cargador del móvil).

Os mentiría si os dijera que no tengo ganas de ir... Me cuesta creer que mañana por la noche vaya a llegar a Atocha y que durante estos días vaya a volver a hacer las cosas que hacia antes de venirme, estoy hasta nerviosa.