Otra de cuestiones climatológicas

Hace unos meses eran las fuertes lluvias las que dejaban a los niños ceutíes sin ir al colegio, mañana será el fuerte viento de poniente. Un viento que, esta misma tarde, levantaba por los aires la cúpula del pabellón Diaz-Flor y obligaba a los bomberos a realizar más de 50 salidas y tener en lista de espera otras tantas. Ahora, escribo desde casa, el viento hace golpear la persiana contra la ventana de mi salón y sólo pensar en que mañana habrá que salir a la calle se me ponen los pelos de punta... porque eso sí, el trabajo no se suspende y aqui la menda mañana tiene que ir a la radio y a la tele. Claro, habrá que contar que pasa.

Para no variar, con esto del viento, el tráfico de buques rápidos en el estrecho está interrumpido desde última hora de la tarde y para mañana no tiene mucha mejor pinta porque, según Tarifa Tráfico, el viento de poniente soplará con fuerza 7-8 y, según windguru, las olas pueden superar los 3'8 metros. Vamos, que mañana para coger un barco hay que echarle un par.

Una vez más estos son los incovenientes de vivir en la ciudad "pequeña, dulce y marinera". Mañana nos olvidamos de tener prensa nacional hasta después del mediodía. Eso es lo que más coraje me da.